Bradley Cooper reflexiona sobre estar sobrio durante 19 años
En el más reciente episodio de «Running Wild With Bear Grylls: The Challenge», Bradley Cooper se enfrenta a una serie de desafíos en los cañones de Wyoming y, en el proceso, comparte abiertamente cómo superó sus propias luchas contra la adicción.
Nuevas aventuras
En el inicio de la segunda temporada de la serie de aventuras de celebridades de Nat Geo, Grylls lleva al nominado al Oscar a la región de la Cuenca de Wyoming, donde se enfrenta a vientos implacables, alturas imponentes y una tormenta invernal.
Afortunado
Después de deslizarse en tirolesa a lo largo de un barranco de 100 pies, Cooper se toma un momento para reflexionar sobre lo «afortunado» que se siente de haber estado sobrio durante los últimos 19 años.
Le llegó la fama de forma gradual
El actor comparte que considera que tuvo la suerte de alcanzar la fama de manera gradual en lugar de repentina; explica que tenía 36 años cuando «The Hangover» se convirtió en un éxito y ya llevaba una década «en el juego, explorando y aprendiendo».
No se dejó llevar por la fama
«No me dejé llevar por la fama», le revela la estrella de «Maestro» a Grylls, quien señala que Cooper «definitivamente pasó por algunas etapas salvajes. Hablando de alcohol y drogas, sí, tuve mis momentos. Pero eso no tenía que ver con la fama», confiesa Cooper. «Tuve suerte, ¿sabes? Superé mi adicción a los 29 años. Y he mantenido la sobriedad durante 19 años».
Tocó fondo
Con anterioridad, Cooper ya había compartido en el podcast Smartless, presentado por Will Arnett, Jason Bateman y Sean Hayes, cómo tocó fondo y qué lo impulsó a buscar la sobriedad. En el año 2004, Arnett había visitado la casa de Cooper y se percató de que ya era tarde en la tarde y sus perros aún no habían sido sacados a pasear. «Esa fue la primera vez que me di cuenta de que tenía un problema con las drogas y el alcohol», recuerda Cooper. «Fue Will quien me lo hizo ver. Jamás lo olvidaré… Eso cambió completamente mi vida».
Una etapa vital de paz
Cooper también le confía a Grylls que su experiencia con el alcohol influyó en su interpretación de un adicto en «A Star Is Born» de 2018, película que además coescribió, coprodujo y dirigió. «Esto facilitó mi inmersión en el papel», admite Cooper en el episodio. «Agradezco estar en una etapa de mi vida donde me siento en paz con todo eso. Así que realmente pude entregarme por completo».