Megan Rapinoe ataca a Luis Rubiales por su beso a Jenni Hermoso
La selección española femenina ha logrado un hito histórico al coronarse campeona en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, superando a Inglaterra en una emocionante final. Sin embargo, la noticia predominante sigue siendo otra. Luis Rubiales, en su papel de presidente de la Real Federación Española de Fútbol, se encuentra en el ojo del huracán debido a una imagen captada durante la celebración en el campo: un beso en la boca a Jenni Hermoso y el gesto de agarrarle la cabeza.
Disculpas insuficientes
Aunque Rubiales emitió disculpas a través de un vídeo, estas han sido consideradas insuficientes por diversos sectores, generando una oleada de críticas que trascienden incluso a la esfera política y que han llevado a presentar denuncias formales. A pesar de esta controversia, no parece que esté considerando la posibilidad de dimitir de su cargo al frente de la RFEF.
Traspasa fronteras
Este episodio ha traspasado fronteras, provocando un debate global sobre la situación y el posible respaldo que Rubiales podría recibir para continuar liderando la federación. La atención que se le ha prestado es un indicativo de la necesidad de cambios profundos en el ámbito del fútbol y la sociedad en general.
Ejemplo de misoginia y sexismo
Recientemente, Megan Rapinoe, una figura icónica en el fútbol femenino y ganadora del Balón de Oro en 2019, compartió sus opiniones sobre el comportamiento de Rubiales durante y después de la final. En una entrevista con The Athletic, criticó la actitud del presidente de la RFEF, especialmente por el gesto de agarrarse la entrepierna tras el pitido final, calificándolo como un ejemplo de misoginia y sexismo.
Desafíos
Rapinoe también reflexionó sobre los desafíos que las jugadoras de fútbol femenino siguen enfrentando en pleno 2023. Recordó el caso de algunas jugadoras españolas que se manifestaron el año anterior contra el seleccionador, Jorge Vilda, y que aún no han sido reintegradas en el equipo.
Lucha constante
En este sentido, destacó la lucha constante que las futbolistas enfrentan no solo en el campo, sino también por la igualdad y el progreso que merecen. La jugadora estadounidense hizo hincapié en que las futbolistas a menudo sienten que están jugando dos partidos en paralelo: uno en el campo y otro para alcanzar la igualdad y el reconocimiento que merecen en la sociedad.
Exigen Igualdad
Su llamado es claro: exigen igualdad salarial, recursos adecuados y un ambiente libre de misoginia, racismo y sexismo en el mundo del fútbol y más allá.