Los actores Gerard Butler y Mike Colter han defendido que «todo el mundo merece una segunda oportunidad» al ser preguntados sobre el veto a Will Smith en las galas de los Oscar tras propinarle una bofetada al humorista Chris Rock en la última ceremonia.
En una entrevista concedida a Europa Press con motivo del estreno el 10 de febrero de la película ‘El piloto’, Colter apunta que no ha pensado mucho en si la Academia de Hollywood debería retirar la prohibición de entrada a Smith en todos los eventos que organice durante 10 años, pero demanda una nueva oportunidad.
«No soy parte de la academia y no lo he pensado mucho… Creo que todo el mundo merece una segunda oportunidad», expresa al ser cuestionado al respecto, una respuesta que Butler comparte.
A un mes de la 95 edición de los Premios Oscar, que se celebrarán el próximo 12 de marzo, Butler y Colter llegan a los cines españoles con ‘El piloto’, una cinta de acción y supervivencia dirigida por Jean-François Richet.
La película narra la peligrosa aventura de un piloto experto, Brodie Torrance (Butler), que aterriza de emergencia un avión repleto de pasajeros en una isla de Filipinas después de sufrir daños en una tormenta. El lugar es una zona controlada por milicias y rebeldes donde los pasajeros correrán nuevamente peligro y Torrance tendrá que aliarse con uno de ellos, Louis Gaspare (Colter), un acusado de asesinato, para salvarlos a todos.
«Es una película de acción, de desastres, de supervivencia, de suspenso, con elementos de drama, divertida y desgarradora a veces. Realmente es una película muy dinámica, con personajes fascinantes (…) que creo que son lo más creíbles posibles», reivindica Butler sobre la cinta que, asegura, permitirá a la audiencia «viajar» con ellos.
HUMANIDAD EN LOS PERSONAJES
Por su parte, Colter destaca que ‘El piloto’ enfatiza el lado bueno de la humanidad: «Cada vez que hay un desastre, las personas se abrazan y simplemente trabajan juntas para sobrevivir. Se olvidan de todas esas pequeñas cosas como qué los separó».
Así, explica que los protagonistas Torrance y Gaspare «no podrían estar más separados al inicio de la película» pero que, tras el accidente del avión, «tienen que descubrir cómo salir de eso como hermanos».
Por otro lado, Butler subraya sobre su personaje (el piloto) que le pareció interesante que es un tipo que «no tiene talento en la nueva circunstancia en la que se encuentra» en el entorno «hostil» de la isla. «No sabe cómo hacer frente a la situación, pero es todo corazón», aplaude, para confiar en que en una situación similar él «haría lo mismo» que el piloto, intentar rescatar a sus pasajeros mirando por el bienestar común.
En este sentido, defiende que la película invita al público a «ver humanidad en todos los personajes»: «Pueden entender a los que se pelean, a los que tienen miedo y a los que son molestos. Pueden ver cómo esto puede suceder y cómo la relación del grupo fluye de negativa a positiva».
«Todos podemos vernos en una situación como esta. Es el tipo de película que me gusta hacer, que el público pueda imaginarse a sí mismo ahí y decir: ‘¿Sería yo ese tipo? Creo que yo sería ese tipo'», concluye.