Ana de Armas
Ana de Armas se sumerge en el desafío de personificar a Marilyn Monroe en ‘Blonde’ de Netflix. En una entrevista con Variety, compartió los límites que traspasó para honrar a Monroe y a su director. Aunque no lamenta su entrega, expresa preocupación por la descontextualización de sus escenas íntimas, revelando un amargo sabor ante la inevitable exposición online.
Angelina Jolie
Angelina Jolie reflexionó sobre las escenas de desnudo y sexo en películas como ‘Gia’ (1998) y ‘Frente al mar’ en 2015, donde actuó junto a su entonces esposo Brad Pitt. Reconoció la rareza de la situación y abordó la situación con franqueza y humor para mantener la comodidad en el set.
Anne Hathaway
Anne Hathaway compartió su experiencia con las escenas de desnudo, describiendo el momento inicial como repugnante y embarazoso. Intentó controlar la situación retrasando su desnudez, pero los contratiempos la llevaron a relajarse. Descubrió que al dejar de preocuparse, la experiencia se volvía incluso divertida.
Antonio Banderas
Antonio Banderas, conocido por su versatilidad en la actuación, reflexiona sobre las escenas de desnudo y sexo en su carrera. Destaca la paradoja de la moralidad en la sociedad, recordando cómo besar a un hombre en ‘La ley del deseo’ generaba más controversia que escenas de violencia. Su observación resalta los juicios hipócritas que rodean estas representaciones en el cine.
Ben Affleck
Ben Affleck reveló su enfoque hacia la desnudez en ‘Perdida’ (2014), destacando la necesidad de autenticidad en su personaje. Reconoció la importancia de mostrar imperfecciones para la veracidad del papel. Su disposición a dejar de lado la vanidad resalta su compromiso con la narrativa y la sinceridad artística.
Cameron Díaz
Cameron Diaz abordó con franqueza su escena desnuda en ‘Sex Tape. Algo pasa en la nube’ (2014), reconociendo que es parte del papel y que se muestra todo.
Dakota Johnson
Dakota Johnson, conocida por su papel en ‘Cincuenta sombras de Grey’ (2015), habló sinceramente sobre una escena desafiante en la que estaba esposada y con los ojos vendados. Reconoció la dificultad de mantenerse centrada a pesar de saber que estaba protegida, destacando la complejidad emocional de la actuación.
Emilia Clarke
Emilia Clarke, conocida por su papel en ‘Juego de Tronos’, reflexiona sobre su experiencia con las escenas desnudas en el set. Para ella, la situación fue abrumadora al principio, encontrándose completamente desnuda ante un equipo de rodaje abrumador.
Halle Berry
Halle Berry compartió su experiencia en la escena de desnudo y sexo con Billy Bob Thornton en ‘Monster’s Ball’ (2001). Ambos acordaron desinhibirse, creando una dinámica equitativa. Para Berry, la eficiencia fue clave; una toma bastó, evitando repeticiones innecesarias. Su enfoque refleja profesionalismo y colaboración en la actuación.
Jennifer Lawrence
Jennifer Lawrence compartió una anécdota divertida del rodaje de ‘Gorrión rojo’ (2018), que involucra la temperatura del set. Sorprendida, exclamó al equipo: «¡Cuidado con la calefacción! ¡Mis pezones se van a poner enormes!». Su humor en situaciones inesperadas muestra su naturaleza genuina y accesible incluso en momentos desafiantes.
Kate Winslet
Kate Winslet adopta un enfoque pragmático hacia la desnudez en pantalla. Con una actitud directa, enfatiza la importancia de enfrentar la situación sin demoras ni quejas. Su visión sincera refleja la naturaleza peculiar pero cotidiana de las discusiones entre actores sobre este tema.
Kim Cattrall
Kim Cattrall, conocida por su papel de Samantha en ‘Sexo en Nueva York’, no teme la desnudez en pantalla. Para ella, al interpretar un personaje, se siente protegida y separada de sí misma. Su enfoque profesional destaca la distinción entre la persona y el papel, permitiendo una representación auténtica.
Leonardo DiCaprio
Leonardo DiCaprio se desnudó en ‘El lobo de Wall Street’ (2013) y comentó al respecto: «Cuando interpretas un personaje así, debes ir más allá. No rendirse. Superar barreras. No eres tú, es otra persona… Espero que la gente lo disfrute», reveló el actor sobre su audaz actuación.
Margot Robbie
Margot Robbie compartió su perspectiva sobre desnudarse ante las cámaras, destacando una mentalidad de «no hay otra opción». Para ella, es una parte inherente de la actuación que debe abordarse con pragmatismo. Su enfoque directo y decidido refleja su profesionalismo y compromiso con su oficio.
Matt Damon
Matt Damon se desafía a sí mismo al encarnar a Scott Thorson, amante de Liberace, en ‘Detrás del candelabro’ (2013). Aunque reacio a desnudarse, cede ante la necesidad del personaje. «Normalmente diría que no a los desnudos, pero es que hice un montón de ellos interpretando a la pareja de larga duración de Liberace», reveló. Su justificación reside en la elegancia de la representación.
Nicole Kidman
Nicole Kidman reflexionó sobre su escena con su entonces esposo Tom Cruise en «‘Eyes Wide Shut’ (1999), describiendo cómo el director Stanley Kubrick quería utilizar su matrimonio como una dinámica provocativa en la pantalla. Kidman señaló que Kubrick buscaba crear una supuesta realidad, aprovechando la tensión matrimonial para la narrativa cinematográfica.
Olivia Wilde
Olivia Wilde no tuvo problemas en aparecer desnuda en ‘En tercera persona’ (2013), pero correr sin ropa fue un desafío. Señaló que repetir la escena varias veces fue agotador, especialmente al bajar corriendo las escaleras desnuda, una situación incómoda ante la cámara.
Penélope Cruz
Penélope Cruz desafió convenciones al desnudarse en ‘Jamón, Jamón’ (1992). Aunque respetada, temió por su carrera. Tras ello, evitó desnudos y escenas íntimas. Su valentía inicial ilustra la complejidad de la industria y las decisiones personales de los actores.
Scarlett Johansson
Scarlett Johansson habló sobre sus escenas de desnudo en ‘Under the Skin’ (2013), señalando que es parte del juego actoral. Para ella, tiene una intención profunda y una organicidad en la narrativa. Su perspectiva destaca la complejidad y la intencionalidad detrás de estas decisiones creativas.
Sharon Stone
Sharon Stone evoca una anécdota de su icónico papel en «Instinto básico» (1992), donde el director le pidió su ropa interior para una escena en la que no se vería nada. Su experiencia destaca las sutilezas y las decisiones detrás de escena que moldean la representación en el cine.