Ashton Kutcher
Ashton Kutcher afrontó serios problemas al cambiar su dieta para interpretar a Steve Jobs en el biopic de 2013, ‘Jobs’. Adoptó el frutarianismo, basado en frutas como Jobs. Sin embargo, todo salió mal. «Acabé en el hospital dos días antes de empezar a rodar la película. Me doblaba de dolor, y mis niveles de páncreas estaban fuera de control, lo cual era aterrador», reveló Kutcher sobre los desafíos que enfrentó por su compromiso con el papel.
Apolonia Kotero
Durante el rodaje de «Purple Rain» (1984), Apollonia Kotero enfrentó un peligro real. Al repetir una escena en la que debía sumergirse en el lago Minnetonka, la actriz comenzó a sufrir hipotermia. En un acto de heroísmo, Prince la abrazó para mantenerla caliente, salvándola de una situación potencialmente mortal.
Daniel Day-Lewis
La dedicación de Daniel Day-Lewis para interpretar a «Bill el Carnicero» en «Gangs of New York» (2002), dirigida por Martin Scorsese, llevó al extremo del método. El actor caminó a temperaturas bajo cero con el traje del personaje, resultando en una neumonía. Day-Lewis admitió que se volvió un poco loco por la preparación, siendo una experiencia maravillosa pero perjudicial para su salud física y mental.
Emma Watson
La decisión respetuosa con el medio ambiente de Darren Aronofsky al prohibir las botellas de plástico en el set de «Noé» (2014) tuvo consecuencias inesperadas para Emma Watson. La actriz reveló que, agotada y delirante a las cinco de la mañana, se vio obligada a beber agua estancada de una taza en su caravana, ya que no había botellas disponibles. La experiencia la dejó mal.
Harrison Ford
La icónica escena de la pistola contra la espada en «Indiana Jones y los cazadores del arca perdida» (1981) fue originalmente concebida como un épico enfrentamiento de espada contra látigo. Sin embargo, se simplificó debido a que Harrison Ford estaba gravemente enfermo de diarrea. El actor confesó: «Iba a ser el duelo definitivo entre espada y látigo. Yo sufría disentería, de verdad, me resultaba incómodo estar fuera de mi caravana más de 10 minutos seguidos».
Jenna Ortega
La escena de baile en ‘Miércoles’, protagonizada por Jenna Ortega, ya era célebre, pero ahora se revela un giro sorprendente. La actriz confiesa que coreografió la escena mientras lidiaba con el COVID. A pesar de despertar con síntomas, continuaron filmando antes de conocer los resultados positivos. Jenna recibió medicación entre tomas, pero tras el diagnóstico, la sacaron del set. Aunque lamenta no poder mejorar la escena, su dedicación es innegable.
John Rhys-Davies
John Rhys-Davies enfrentó desafíos al interpretar al enano Gimli en las películas de «El Señor de los Anillos». Las prótesis faciales, que contenían látex, resultaron ser un problema, ya que el actor es alérgico a dicho material. Lidiar con irritación en la piel y ojos hinchados no era algo agradable para Rhys-Davies mientras daba vida al intrépido enano en la trilogía.
Jonah Hill
En ‘El lobo de Wall Street’ (2013), Jonah Hill enfrentó consecuencias inesperadas por el excesivo consumo de Coca-Cola ficticia. En lugar de esnifar drogas, las escenas requerían inhalar polvo de vitamina. Aunque el polvo era seguro en pequeñas cantidades, Hill y el elenco se expusieron diariamente durante siete meses. La ingesta excesiva llevó a Hill a ser hospitalizado, demostrando que incluso los simulacros pueden tener repercusiones reales.
Leonardo DiCaprio
El rodaje de ‘El renacido’ (2015) fue extremadamente desafiante debido a las condiciones meteorológicas adversas. Sin embargo, la prueba más difícil para Leonardo DiCaprio fue morder un hígado de bisonte crudo en una escena. Siendo vegetariano, la experiencia lo hizo enfermar frente a las cámaras. A pesar de los desafíos, DiCaprio ganó un Oscar por su actuación, quizás justificando el sacrificio.
Melvin Van Peebles
Durante el rodaje de la película de blaxploitation ‘Sweet Sweetback’s Baadasssss Song’ (1971), Melvin Van Peebles contrajo una sorprendente enfermedad. Su intensidad en las escenas de sexo fue tan extrema que contrajo gonorrea. Peebles demostró su dedicación al arte cinematográfico, pero esta vez, los riesgos tomados en pantalla tuvieron consecuencias inesperadas.